En algunos países es tradición que cuando las niñas cumplen 15 años se les hace una fiesta en su honor en la que se presenta a la niña en sociedad como adulta.
Algunos de los ritos para representar ese paso de niña a mujer incluyen regalar la última muñeca a la quinceañera.
Estas muñecas acostumbran a ir vestidas igual que las quinceañeras. Aunque también hay colecciones de muñecas diseñadas especialmente para quinceañeras.
En la web
Quinceanera.com nos explican muy bien que significa esta "last doll" (última muñeca):
En algunas regiones de México es costumbre que la quinceañera reciba de su padre la última muñeca, generalmente es un juguete fino de porcelana, pero también se usan muñecas como Barbies y muñecas con vestidos que asemejan al traje que asemejan al de la homenajeada.
Después del baile, algunas quinceañeras lanzan la muñeca a las jovencitas presentes que aún no son quinceañeras o la obsequian a su hermana menor o alguna prima mas chica por la que sientan un cariño especial.
La entrega de la última muñeca es un momento especial para padre e hija, que a través de la ceremonia simbolizan el paso a la adultez y a cambio de intereses de la hija hacia cuestiones más adultas, dejando atrás los juguetes para asumir sus nuevos roles, mayor independencia pero también responsabilidades.
Estas muñecas pueden ser motivo tanto para la decoración del salón, como los centros de mesa, el pastel y por supuesto, los recuerdos. Afortunadamente, hay muchos motivos para elegir, lo cual dependerá de la preferencia de la quinceañera.